Seguro que ya conoces el Foam Roller, es uno de los props que utilizamos en las clases de Pilates.
Es un rulo de espuma Eva, puede ser de otros materiales, pero éstos son los que más se utilizan en Pilates.
Forma parte de los implementos considerados inestables, de modo que nos ayuda a trabajar los músculos estabilizadores profundos.
Como la mayoría de los props nos pueden ayudar a facilitar a los alumnos algunos ejercicios, como por ejemplo Bicycle in the air, Helicopter...en los que les cuesta mucho mantenerse sobre las manos. O, también, puede darle un grado de dificultad a ejercicios como el Roll up o Toe Taps...
Es una estupenda herramienta para trabajar la actitud cifótica con el Chest Stretch o a ayudar a estos alumnos a hacer Swan Dive.
Ayuda, además, a mejorar nuestro equilibrio y control del cuerpo. También, ayuda a recordar al alumno la importancia de unos de los principios de Pilates, concentración, ya que según el alumno avanza en su práctica a veces se olvida de éste y al suponer, el rulo, un nuevo reto vuelven a tener que estar concentrados o más concentrados.
Y por si todo esto fuera poco, el rulo nos puede servir al finalizar nuestra sesión de Pilates para un masaje miofascial, el peso corporal contra el foam roller aumenta el flujo sanguíneo y aunque pueda ser un poco molesto en algunas zonas, como por ejemplo, al pasarlo por el tensor de la fascia lata, al final nos ofrece una buena sensación de descarga y bienestar, ¿qué más le podemos pedir?
Y tú, lo has probado ya? Te animas a hacerlo?
Raquel González
Instructora certificadaYoga, Pilates y Entrenamiento Personal. Experta Universitaria en Psicología y Alimentación Deportiva.